Oscuro

El Mal, con sus infinitas encarnaciones, nos rodea a cada instante. En el interior de cualquier ser humano existen sombras, de mayor o menor tamaño, cuya liberación acostumbra a conllevar dolor y muerte. Pero hay un Mal más profundo, más antiguo, cuyo origen se pierde en la noche de los tiempos. Una malignidad tan pura que, si lograra escapar de la prisión que la contiene, acarrearía horrores imposibles de soportar.

¿Qué ocurriría, entonces, si el horror descendiese sobre una apacible población norteamericana? La respuesta a dicha pregunta la acabarán conociendo los habitantes de Crystal Hood, el lugar que habrá de enfrentarse a los designios de la misteriosa entidad conocida como el Oscuro. Pero queda por ver si quedará alguien con vida para poder compartir esa respuesta con el resto del mundo.

 Ethan e Isaiah

Ethan Crow lleva catorce años internado en el Shine Memorial Hospital, sumido en un estado catatónico desde que era un niño. Ahora, coincidiendo con una serie de terremotos que asolan la zona, el joven despierta de su letargo para emitir una ominosa advertencia: “Ya viene”.

Isaiah, el hermano mayor de Ethan, acudirá al hospital junto a su buen amigo Sunny. Allí será testigo de los extraños acontecimientos aparentemente asociados al despertar del convaleciente, y comprenderá que algo amenaza a la ciudad, mientras su mente comenzará a experimentar visiones que le harán dudar de su cordura.

Cuando el horror se abata sobre Crystal Hood, la responsabilidad de tratar de ponerle fin recaerá sobre el mayor de los Crow. Pero Isaiah no sólo tendrá que enfrentarse al Mal, sino que deberá luchar contra la incredulidad de sus allegados mientras todos intentan sobrevivir a la maldición que parece haber caído sobre sus hogares.

 Pasado y presente

“Oscuro” es una novela que desarrolla gran parte de su trama en el pasado. Mediante abundantes flash-backs conoceremos detalles de la difícil infancia de los hermanos Crow, dominada por un padre borracho y violento. También descubriremos aspectos interesantes de la relación de Ethan e Isaiah con Sunny (miembro de las fuerzas del orden en la actualidad) y Steffi, una joven perdidamente enamorada del mayor de los Crow.

Sin embargo, lo más importante será la serie de revelaciones sobre el origen y la naturaleza del Oscuro, y su conexión con Ethan. Cierta peculiar habilidad del niño, alimentada por la tensión soportada en el hogar familiar, jugará un papel fundamental para los futuros acontecimientos que se desencadenarán en Crystal Hood. Numerosas sorpresas aguardan agazapadas en un pasado que, como suele ser normal, condiciona nuestro presente.

 El horror vive en los Estados Unidos

No es la primera vez que un autor español elige las tierras norteamericanas para ambientar una novela de terror. Ahí está, por ejemplo, Juan de Dios Garduño con su exitosa “Y pese a todo”, cuya acción transcurre en Bangor, Maine, hogar del celebérrimo Stephen King (con quien volveremos dentro de unas cuantas líneas). Al igual que Garduño, Teo Rodríguez ha optado por situar a sus personajes en una población (ficticia en este caso) enclavada en el estado de Dakota del Sur.

¿A qué puede deberse tal elección de escenario? Desde El Mar de Tinta nos atrevemos a aventurar una posibilidad: hay determinado tipo de narración terrorífica que todo aficionado al género ha podido disfrutar tanto en libros como en películas. Quizá sean estas últimas, rodadas en su mayoría en bucólicas poblaciones norteamericanas, las que hayan contribuido más a fijar en nuestro inconsciente una ubicación ideal para ciertas historias.

Lo cierto es que, mal que nos pese, hay argumentos que funcionan a la perfección cuando transcurren en la típica pequeña ciudad estadounidense, aunque chirriarían si tuvieran lugar en una de las nuestras. Sea como fuere, posiblemente cierto rey del Terror moderno también tenga algo que ver con la existencia de Crystal Hood.

 La “oscura” sombra de King

El mismo Teo Rodríguez cita como fuente de inspiración a Stephen King en los agradecimientos incluidos al final de su novela. Es innegable que “Oscuro” le debe mucho al genio de Maine, especialista en enfrentar al horror más extremo a los habitantes de alguna tranquila ciudad como Castle Rock, Salem’s Lot o Derry.

El estilo de Rodríguez también es deudor en cierto modo del de King. Salvando las distancias, casi podríamos establecer un cierto paralelismo entre “Oscuro” y el “IT” kingniano, obra con la que comparte estructura narrativa. La voz de Teo Rodríguez es, no obstante lo suficientemente personal como para no confundirse con la de su mentor literario.

Un debut notable

Teo Rodríguez se estrena como novelista con este libro, editado por Minotauro en su imprescindible colección dedicada al Terror, si bien antes de que “Oscuro” viera la luz, Rodríguez ya había publicado una antología de relatos en Scylaebooks. Por otro lado, a muchos lectores aficionados al misterio radiofónico y televisivo el nombre del autor madrileño les resultará probablemente familiar, pues cuenta en su haber con la redacción de numerosas historias dramatizadas o filmadas en los programas “Milenio 3” y “Cuarto Milenio”, presentados ambos por el popular Íker Jiménez.

“Oscuro” es una buena novela que no llega a resultar sobresaliente por culpa de un final que nos ha parecido un tanto anticlimático. Si bien los personajes resultan interesantes, y Rodríguez dosifica poco a poco la acción hasta alcanzar el momento en el cual se desencadena el horror, a partir de ese instante la historia decae lentamente hasta alcanzar una conclusión que se nos antoja insatisfactoria.

No obstante, a pesar de lo anteriormente expuesto, el libro de Teo Rodríguez es una excelente carta de presentación para un autor que estamos convencidos nos dará grandes sorpresas en el futuro. Por lo tanto, la recomendamos sin reservas a todo lector aficionado a la buena literatura de Terror deseoso de comprobar la existencia de vida en el género patrio más allá de los omnipresentes zombis.