Berserk

La muerte de un hijo es una experiencia que ningún padre debería sufrir. Cuando ocurre, en numerosas ocasiones se convierte en un punto de inflexión en la vida de los progenitores, cuya existencia queda marcada para siempre. Además, si se da el caso del fallecimiento de un hijo único, el daño padecido resulta, si cabe, todavía mayor.

Han pasado diez años desde el fatídico día en el cual Tom y Jo Roberts perdieron a su hijo Steven. El joven soldado pereció en tierras inglesas, en un absurdo accidente ocurrido mientras participaba en unas maniobras. El terrible estado en el cual quedó su cuerpo hizo que el cadáver se entregase a sus padres en un ataúd sellado, privándoles de la oportunidad de darle un último adiós.

“Allí tenían monstruos”

Tres palabras, escuchadas por casualidad en un bar y referidas a la base militar donde estaba destinado su hijo, harán que Tom se replantee por completo todo cuanto conocía sobre el destino de Steven. Una conversación entre dos militares retirados sembrará una duda que, posteriormente, uno de ellos se encargará de alimentar al confesar lo que ocurrió realmente.

Steven no murió durante unas maniobras. Su muerte fue consecuencia de algo mucho más horrible, y su cuerpo no yace en el ataúd entregado a sus padres, sino que se halla sepultado en una fosa común. Tal revelación hará que Tom se dirija al lugar con la intención de desenterrar los restos de su hijo. Pero lo que encontrará en la fosa no será lo que esperaba.

Entre los cuerpos de varios soldados, ninguno de los cuales es Steven, yacen cuatro cadáveres mutilados y encadenados. Y uno de ellos es el de una niña. Una niña que debería estar muerta pero que, inexplicablemente, sigue viva tras una década bajo tierra. A partir de ese momento, Tom se dedicará a obedecer la voluntad de la extraña criatura, tras obtener de ella la promesa de información relativa al paradero de su hijo. Pero el viaje que iniciarán estará plagado de peligros, pues Cole, un antiguo militar al tanto de la verdadera naturaleza de la pequeña, está decidido a acabar con ella antes de que pueda recuperar plenamente sus capacidades.

La naturaleza de los berserkers

La palabra “berserker” se aplicaba a determinados guerreros vikingos que entraban en combate bajo cierto trance de perfil psicótico, casi insensibles al dolor. Se lanzaban a la lucha con furia ciega, incluso sin armadura ni protección alguna. Su sola presencia atemorizaba a sus enemigos e incluso a sus compañeros de batalla, pues en estado de trance no estaban en condiciones de distinguir aliados de rivales.

Los berserkers que aparecen en la novela que nos ocupa (y sobre cuya verdadera naturaleza no podemos comentar demasiado, a fin de evitar revelar detalles importantes de la trama) comparten con los guerreros nórdicos de antaño su tremendo potencial destructor. Sin embargo, los seres que se nos describen en “Berserk” no utilizan hachas o espadas para destruir a sus enemigos. Mortales garras y dientes, combinados con una velocidad sobrehumana y una asombrosa capacidad regenerativa, les convierten en armas mucho más mortales que las empuñadas por los seres humanos.

Los secretos de Porton Down

Las actividades llevadas a cabo por los ejércitos de todo el mundo siempre han sido uno de los temas más comentados por los aficionados a las conspiraciones. Todos hemos escuchado o leído en alguna ocasión historias sobre armas secretas, prototipos militares de todo tipo y experimentos clandestinos de naturaleza muy diversa, pero con un único fin: aumentar la capacidad de las fuerzas armadas para destruir de forma rápida y eficaz a sus enemigos.

La base militar de Porton Down oculta grandes secretos, sobre los cuales no podemos extendernos en esta reseña. Secretos íntimamente relacionados con la muerte del grupo de militares entre los que debía encontrarse el hijo de Tom Roberts, y cuyo conocimiento obliga a Cole a actuar con frialdad asesina. Sea como fuere, se trata de un ejemplo ilustrativo de hasta qué punto están dispuestos a llegar los altos mandos militares con tal de dotar a sus ejércitos de un poder mayor, sin que les importen las consecuencias ni les frene consideración moral alguna.

Un autor original y prolífico

Con casi cuarenta novelas en su haber, Tim Lebbon es un escritor muy popular en el Reino Unido, pero casi un completo desconocido en nuestro país. La única obra aparecida en España con anterioridad a “Berserk”, también de la mano de La Factoría de Ideas, fue “El rostro”. Con toda probabilidad, al contar con tan amplio corpus literario inédito, el libro que nos ocupa no será el último que veamos traducido al castellano.

Desde El Mar de Tinta quisiéramos destacar la originalidad de “Berserk”, una novela plagada de sorpresas, que combina una trama en creciente tensión con escenas brutales, al tiempo que presenta unos “monstruos” sanguinarios pero dotados de una inesperada humanidad. Una obra que destaca entre la amplia oferta disponible en el panorama editorial la cual, sin duda alguna, agradará a los lectores que busquen un libro de Terror diferente.

2 respuestas a «Berserk»

  1. Me alegra que te haya gustado, Borja. Dentro de poco tendré en mis manos «El rostro», que espero esté a la altura de «Berserk». Y estoy convencido de que veremos más novelas de Lebbon de la mano de La Factoría.

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