Bailes de medio siglo: entrevista a Martín Sotelo

Mientras esperamos a que Martín Sotelo lance su nuevo trabajo, hemos decidido rescatar su opera prima, publicada el pasado mes de marzo por Nocturna Ediciones. «Bailes de medio siglo» combina el crimen pasional, romance y destinos funestos con un ritmo trepidante y melancólico. En la presente entrevista, el propio autor nos habla un poco más de la obra. Desde El Mar de Tinta estamos seguros de que no pasará desapercibida a los lectores avezados.

La novela

Pregunta: ¿Cómo surge “Bailes de medio siglo? La sinopsis indica que está basada, en parte, en un suceso real. ¿Podría darnos más detalles acerca del acontecimiento que inspiró el crimen con el que se inicia la novela?

Respuesta: Un anciano que mata a su mujer y que cincuenta años atrás mató al primer marido de la víctima precisamente para poder casarse con ella. Con eso arranqué. Imaginando la deuda de sangre que ella contrajo con el hombre que fue capaz de matar por ella, me puse a escribir. No sé nada más del caso real porque no me interesaba.

P: El argumento imbrica cuidadosamente distintos personajes, ¿Qué destacaría de los dos protagonistas? ¿Y de la hija de Florinda?

R: De Nilo, sus celos, sus complejos, su miedo, sus delirios, su obsesión, su amor enfermo. De Florinda, su deuda, su forma resignada de expiar la culpa, su rendida vitalidad. De Isabel, la hija, su deseo, y renuncia al mismo tiempo, de comprender y comprenderse. 

P: La narración se mueve constantemente entre el presente y el pasado, descubriendo datos al lector a medida que se avanza en la lectura. ¿Hubo un motivo para contar la obra de esta manera?

 R: Un motivo que ya se anuncia en el Antiguo Testamento. El que dice que cuando digo hoy, ya era ayer y es mañana.

P: La historia de amor trágica, los sentimientos de Nilo y Florinda son el eje argumental que provoca todos los acontecimientos narrados en el libro. Cómo los describiría ¿víctimas del destino o causantes equivocados?

R: Víctimas de una época, de unos orígenes, de una pasión convertida en delirio, de los demás y de sí mismos.

P: ¿Cómo definiría el “baile de medio siglo” entre Florinda y Nilo, su desdichada unión por culpa de una promesa ajada?

 R: Como son todos los bailes: unas veces lentos y agarrados, otras frenéticos, distantes y arrebatados.

P: La acción se ubica en una época de España muy convulsa: entre la posguerra y el renacer del país, con cambios políticos, sociales y de mentalidad. ¿Cuál fue la razón de colocar a los dos protagonistas en ese tiempo?

R: Yo no elegí el tiempo. Era el tiempo que les tocaba vivir. Me interesaba ese contraste entre un país que avanza en derechos y libertades y una pareja que vive de espaldas a dicha evolución, que vive su particular conflicto íntimo y personal al margen de la historia política que la rodea. No quería que la Historia con mayúscula del país ensombreciera la historia en minúscula de los protagonistas.

P: Algunos de los personajes que aparecen en la novela resultan estereotipos perfectos y, las escenas que se suceden -el crimen en una familia de clase alta, las especulaciones sobre la culpabilidad de la mujer por venir de una familia humilde- son un claro reflejo a las  creencias imperantes de la sociedad española. ¿Considera que su libro tiene un trasfondo crítico contra la sociedad de este país?

R: Todo libro que se precie tiene un trasfondo crítico. Pero yo no escribo pensando en la sociedad. La sociedad está compuesta de individuos. Son ellos los que me interesan.

P: «Bailes de medio siglo” tiene, sin duda alguna, tintes de novela negra. ¿En qué otras grandes novelas sobre crímenes se ha inspirado?

R: En todas las que me gustan y en ninguna en especial. Me gusta la novela negra que no se considera como tal. Como Crimen y Castigo, por ejemplo. Yo quería contar algo tan sencillo y tan complicado como la convivencia entre dos personas durante cincuenta años. Todo ese morbo tan característico de la novela negra, de quién es el asesino, etcétera, yo ya lo desvelo en el primer capítulo. Precisamente para poder dedicarme durante el resto de la novela a contar lo que de verdad quería contar.  

P: Si tuviera que escoger a uno de los personajes, o una de las duras historias que narra en su libro, ¿con cuál se quedaría?

R: Con Florinda y su historia, a pesar de ser el personaje que trato menos abiertamente en la novela.

P: ¿Cree que los protagonistas, buscan en algún momento redimirse y encauzar su vida para atisbar, a ser posible, la felicidad?

R: La búsqueda de la felicidad implica siempre una redención. Es precisamente el deseo de ser felices lo que les conduce a la tragedia, al desenlace fatal de frustraciones, rencores y expectativas no resueltas.  

P: ¿Cómo describiría, a grandes rasgos, este su primer trabajo literario?

R: Como un reto. Como una aproximación a los demás y a mí mismo.

El autor

P: Su trayectoria profesional está salpicada de trabajos relacionados con el mundo de la literatura. ¿Qué le decidió a dar el salto y escribir “Bailes de medio siglo”?

R: Yo ya escribía antes de desempeñar ningún trabajo; escribía, de hecho, a pesar de los estudios y los trabajos. No es una decisión el escribir; es una necesidad.

P: ¿Ha sido ésta una experiencia satisfactoria?

R. Nunca lo es. Suele haber mucha distancia entre lo que uno se plantea de entrada y el resultado final. Un escritor que se tome en serio la tarea, irá de frustración en frustración. No es tan importante el alcanzar la verdad como el hecho de dejar testimonio de la lucha por alcanzarla. Y me gusta que el lector comparta conmigo esa lucha por lograr atisbar la verdad, por imaginársela.

P: ¿Cómo definiría su prosa?

R: Como mi mente, que es descuidada, engañosa y zigzagueante, llena de meandros, siempre pensando en otra cosa y dando saltos, ramificándose, uniéndose, divagando.

P: ¿Qué autores u obras han marcado más su estilo literario?

R: Muchos y muchas. Por nombrar a algunos, Faulkner, Onetti, Rulfo, Marsé.

P: ¿Puede adelantarnos un poco de su próxima novela?

R: Será una novela del mismo estilo: dura, devastadora, con mezcla de sueño y realidad, muertes y contagios de por medio, mujeres locas… Para alegrar un poco al personal en esta época de crisis.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *